jueves, 26 de febrero de 2015

24 febrero 2015 culturamas.es (opinión)

24 febrero 2015

“El impostor”

Javier Cercas Mena (Cáceres, 1962 – ) es un profesor universitario, escritor y columnista en el diario El País. Su obra resalta por conjugar diferentes estilos narrativos como el testimonial o el ensayístico. Además ha realizado diferentes traducciones de obras de otros autores.
Desde su adolescencia se interesó por la literatura y el cine, y de forma ocasional consumía drogas menores. Respecto a su opinión política, él no era favorable al franquismo y consideraba a su padre como un oportunista aunque esa imagen fue variando de forma positiva.
En 1985 se convirtió en Licenciado en Filología hispánica por la Universidad Autónoma de Barcelona. Hubo un tiempo en el que además de ser profesor universitario en países como Italia, concretamente la ciudad de Gerona, se dedicó a escribir artículos y reseñas para diversos periódicos. En la actualidad colabora de manera continua en el suplemento dominical y cultural de El País, llamado Babelia.
En 2001 le llega el reconocimiento mundial como escritor con la publicación de su libro Soldados de Salamina. Esto le permitió dejar su trabajo como profesor y dedicarse de forma exclusiva a la literatura. Como matiz personal e ideológico Cercas se declara una persona atea y anticlerical además de sentirse interesado por la política de Ciudad del Vaticano.
El impostor es el título a un hombre. A un hombre sin nombre, sin pasado real, sin vida real. Javier Cercas, en este libro, nos introduce en la vida (o mentira) de Enric Marco, si ese es su verdadero nombre. Cercas conocía a Marco mucho antes de atreverse a escribir sobre él. (Documento 1). Nos enfrentamos a dos verdades opuestas con muchas mentiras de por medio. Estamos frente a la vida del propio autor y también la del protagonista del relato que nos ocupa.
Enric Marco, según él, fue un luchador incansable del franquismo y por ello se convirtió en Secretario General de la CNT a nivel estatal. En ese cargo se dedicó a conseguir contactos, a aprender sobre la historia de su país y dinamitar el propio sindicato desde dentro en plena transición democrática y siendo uno de los principales sindicatos de España. Más tarde, después de su salida, defendió la escuela pública siendo el Secretario de la Federació d’Associacions de Mares i Pares d’Alumnes de Catalunya (Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Cataluña, FAPAC). En la FAPAC fue donde su historia aumentó considerablemente y sirvió para ejemplificar su lucha por una sociedad mejor siempre del lado de los trabajadores. Cuando sus dos hijos dejaron de ser alumnos él tuvo que dimitir.
Como última instancia y poco a poco llegó a ser presidente de la Amical de Matthausen como superviviente de un campo anexo al que el propio nombre indica. Ahí realizó un trabajo muy laborioso y con resultados eficaces además de eficientes. Los viajes se multiplicaron, la asociación creció, las conferencias se convocaban por todo el país y los colegios, sobre todo de Cataluña, tuvieron la oportunidad de escuchar un testimonio sobre cómo fue la vida en los campos de trabajo y concentración durante la II Guerra Mundial, como se puede apreciar en el vídeo que se adjunta en el Documento 2.
Hasta aquí la historia pseudopolítica de este personaje. Y sí, pseudo. Por la culpa de Javier Cercas y su carácter indefinido entre la realidad y la ficción nunca sabremos toda la verdad sobre esta historia. Pero Cercas no se olvida de él mismo y se introduce en el relato, ya que en sus propias palabras “toda novela es autobiográfica”. Enric Marco o como se llame jamás ha sido lo que ha dicho ser. Y se pilla antes a un cojo que a un mentiroso.
Primero, su vida personal deja mucho que desear, como podremos descubrir en el libro que nos atañe, pero me gustaría centrarme más en su vida real en relación con su propia actividad política. Lo más cercano que ha estado a un campo de concentración nazi fue al viajar (para librarse del servicio militar obligatorio) a Alemania en una partida de trabajadores españoles que el dictador fascista Francisco Franco entregó al país centroeuropeo. Con esa excusa y una vez finalizada la dictadura en su país natal volvió a Alemania, concretamente al campo de Flossenbürg (Baviera), en el que menos de dos decenas de españoles estuvieron recluidos. Sirviéndose de ello nuestro protagonista usó un nombre del listado, que se le facilitó sin problemas por parte de la administración del campo, para hacerse pasar por esa persona. Fue el historiador Benito Bermejo el que descubrió la falsedad de nuestro protagonista. Las consecuencias fueron increíbles con repercusiones internacionales. Se desmanteló la enmaraña de embustes que Marco había tejido con el paso de los años. Jamás había estado exiliado en Francia, como él afirmaba; se vio obligado a devolver la Cruz de Sant Jordi, la máxima distinción civil en el territorio catalán con la que le habían condecorado, así como la destitución de su cargo en la Amical apenas unos días antes de leer un discurso, por primera vez delante de un presidente del Gobierno español, en el propio campo de Matthausen. Este descubrimiento llegó tarde para evitar su intervención en el Congreso de los Diputados. Dicha intervención está recogida parcialmente en el Documento 3.
Enric Marco quedó desarticulado y desvinculado de toda acción social. Decidió dedicarse a su familia, cosa que nunca había sucedido en la medida que se debiera.
Esta es la historia de un nombre y no de un hombre, de Enrique Marco Batlle, de Enrique Marcos (durante la transición) y de Enric Marco (seguramente hasta el final de sus días). Pero nos encontramos ante una nueva duda. Javier Cercas siempre empieza sus relatos formulando una pregunta y el mismo relato se compone de la búsqueda de la respuesta. ¿Ficción? ¿Al 100%? ¿Seguros? ¿Omitir la verdad es mentir? ¿Quién no ha mentido alguna vez en su vida?

Opinión:

Cada vez que hablan sobre Enric Marco me viene a la mente que no es el único impostor. También en el mundo de víctimas del terrorismo hay otros y otras que se han inventado secuelas, que explican cosas que jamás han vivido y mucho menos sufrido, que se han construido una “película” para el propio provecho personal, que se han pasado años “poniendo la oreja” cuando hablábamos las víctimas reales para construirse un relato paralelo, que has empezado a tener secuelas pasados veinte años del supuesto atentado, que.....
Mejor lo dejo, este tema ya me cansó en su momento y tomé la decisión de seguir trabajando por libre.  Me cuesta mi dinero, me cuesta mi poquísimo tiempo libre… pero me da la oportunidad de poder acostarme cada noche con la conciencia absolutamente limpia y tranquila.
Y lo mejor de todo es que cada día que pasa somos más los que exigimos que no nos relacionen con ninguna sigla. Con nin-gu-na....



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