18 septiembre 2015
Las víctimas del terrorismo siguen molestas,
inquietas, y exigen explicaciones sobre los
contactos del Ministerio de Justicia francés con el entorno de ETA. Quieren
conocer el alcance de esa docena de reuniones desveladas por EL MUNDO.
Consideran que el hecho de que al menos en dos de ellas haya participado
directamente la ministra de Justicia francesa, Christiane Taubira, da mayor gravedad a estos contactos.
Primero fue Dignidad y Justicia la que
levantó la voz, junto a otras seis organizaciones de víctimas. Este jueves ha
sido la AVT la
que ha exigido explicaciones. La asociación mayoritaria de víctimas pide
aclaraciones al Gobierno español. Ha remitido una carta a los titulares de
Interior, Jorge Fernández Díaz, y de Justicia, Rafael Catalá, pidiendo
explicaciones y reclamando saber si la ministra francesa se ha reunido con
enviados de ETA.
Tras desvelar EL MUNDO estos encuentros, el titular de Justicia español
les restó importancia y aseguró que Taubira ya le había informado de ellos
durante su reciente visita a España, explicándole que se trataba de reuniones
con organizaciones de familiares de presos de ETA.
Este periódico informó de que la delegación del entorno de ETA estaba
formada por dos miembros de la izquierda abertzale, vinculados con Iparretarrak
y que habían sido condenados por atentados.
El primer integrante del entorno etarra es Jean-François Lefort, veterano
militante abertzale que ha pasado por cárceles francesas
por colocar artefactos explosivos. Fue juzgado por su pertenencia a Askatasuna y
en la actualidad forma parte de la dirección de Sortu en
Francia.
El segundo participante en las reuniones es Jean-Gabriel Mouesca,
hijo de un gendarme francés. Formó parte de Iparretarrak y fue condenado a 17 años de cárcel
-entre 1984 y 2001- por su relación con un asesinato.
En sus misivas, la AVT
también reclama al Gobierno español que adopte las medidas diplomáticas
necesarias para interrumpir «cualquier tipo de contacto que pueda existir entre
ETA y el Gobierno francés». También le pide que alerte al Ejecutivo del país
vecino de «la gravedad de los hechos y lo perjudicial que dichos contactos
pueden suponer para la derrota definitiva de ETA, así como el grave perjuicio
que suponen gestos de este tipo a la dignidad de las víctimas».
Este periódico contactó con el Ministerio de Justicia francés antes de
publicar la información sobre los encuentros. El Departamento que dirige
Taubira negó que representantes de la organización ETA o políticos cercanos a
la organización hayan sido recibidos en la sede del Ministerio de Justicia,
según informa María Valderrama.
Sí admitieron, sin embargo, que miembros de asociaciones de apoyo a los
detenidos en Francia han sido recibidos en el Ministerio.
Los representantes abertzales piden acercamientos de los detenidos
de ETA en Francia a sus familiares, mediante su traslado a establecimientos
penitenciarios más cercanos al País Vasco. Se les ha respondido que sus casos
serán estudiados uno por uno por razones de humanidad, según un portavoz
oficial.
El Gobierno francés no negó tampoco que en dichos encuentros hubiera
participado la propia ministra de Justicia.
Opinión:
Para empezar, la aclaración de siempre. Nuevamente
se aplica el artículo “las” ante la palabra víctimas cuando quien realiza la
reclamación es una asociación de víctimas en la que, evidentemente, no estamos “las”
sino algunas víctimas... y ello sin olvidar que también hay quien sin ser víctima
se dedica a hablar en nombre de “las”.
Me consta el hartazgo de muchas víctimas que
pertenecen a asociaciones ante lo que está ocurriendo entre otras razones
porque hay muchas víctimas que desean darse de baja de alguna asociación y no
se les permite..
Por ello, vuelvo a rogar a los periodistas que al
hablar de las actividades de una asociación (la que sea) no generalicen como si
el colectivo en pleno estuviera de acuerdo.
Recuerdo toda esta realidad porque, en determinadas épocas
en las que ETA ejercía su actividad terrorista , representantes de los
diferentes gobiernos se entrevistaban con el entorno etarra o directamente con
la banda terrorista... y se entendía que lo hacían por el bien común y con el
objetivo de terminar con el sufrimiento.
Ahora la noticia es que se entrevistan con gente que
está en la calle libremente pero parece que algunos olvidan que hay antiguos
terroristas que han acabado en listados de partidos políticos.
También aclaro otro hecho: que alguien se entreviste
con el entorno etarra no afecta en nada a mi dignidad, la cual tengo muy alta
después de llevar 28 años trabajando para cientos de víctimas del terrorismo. Mi
dignidad es mía y nadie tiene derecho a hablar en mi nombre ni en el de cientos
de víctimas que no pensamos como marcan los supuestos representantes. Por ello
me niego a que algun@s usen y generalicen esa palabra como medida de presión.
Mientras tanto, ETA sigue derrotada y el mes que
viene se cumplirán cuatro años del comunicado en el que, les guste o no, lo
reconocieron.
Parece que hay quien no ha entendido cuales fueron
los pasos previos para conseguir esa derrota.
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